Causas comunes por las que se devuelven a los perros adoptados y como prevenirlas.
Lamentablemente, algunas adopciones no funcionan y los perros son devueltos a los refugios o albergues. Comprender las causas más comunes por las que se devuelven los perros adoptados, puede ayudar a futuros adoptantes a estar mejor preparados. La idea siempre es conseguir un hogar permanente. Darles un nuevo lugar para vivir, pleno de cariño y cuidados, evitándoles así el sufrimiento y ansiedad que experimentan con los cambios.
Un estudio publicado en la revista Nature en el año 2021, revela las principales razones por las que los animales de compañía son devueltos después de la adopción. En él han determinado qué razas de perros son las que más se devuelven y cuáles menos. Los motivos principales son los problemas del comportamiento y la incompatibilidad con los perros o gatos que ya formaban parte de la familia.
A continuación, voy a nombrar las razones más frecuentes del por qué los perros adoptados pueden ser devueltos y algunos consejos para prevenir tal situación.
Expectativas fuera de la realidad.
Causa: Muchos adoptantes tienen expectativas poco realistas sobre el comportamiento y la adaptación de un perro adoptado. Esperan que el perro se adapte de inmediato a su nuevo hogar y que no existan problemas de comportamiento.
Prevención: El adoptante tiene que investigar y comprender que cada perro es único y puede requerir tiempo para adaptarse. Debe consultar con el refugio o la organización que ofrece al perro sobre su comportamiento y necesidades. Considerar que se debe de estar preparado para un período de adaptación y entrenamiento.
Problemas de comportamiento.
Causa: Los perros adoptados pueden mostrar comportamientos no deseados, como ladrar en exceso, agresividad, ansiedad por separación y destrucción de objetos entre varios más.
Prevención: Antes de adoptar, es conveniente leer un poco sobre educación y entrenamiento canino con métodos positivos. Muchos refugios entregan a los perros adoptados con ciertas bases de entrenamiento u ofrecen apoyo post adopción con entrenadores o consultores en comportamiento canino. También es muy útil establecer una rutina clara desde el principio. Esto ayuda al perro a sentirse seguro y a entender las reglas de su nuevo hogar.
De igual forma, se debe consultar con él medico veterinario o un criador de la raza a adoptar, cuáles son sus características y personalidad. Nos puede cautivar su físico, pero sus hábitos marcados genéticamente posiblemente no nos agraden.
Problemas de salud no anticipados.
Causa: Algunos perros pueden tener alteraciones en su salud que no se detectaron inicialmente o desarrollarlas después de su adopción. Esto puede significar la necesidad de un presupuesto, alto en ocasiones, que no contemplaba el adoptante.
Prevención: Es conveniente asegurarse de obtener toda la información disponible sobre la salud del perro antes de adoptarlo. Preguntar sobre cualquier condición médica preexistente y considerar contratar un seguro para mascotas que ayude con los costos inesperados. Tener una cita con el médico veterinario cercana al día de la adopción, ayuda a identificar de manera temprana cualquier problema de salud y darle tratamiento.
Cambio en las circunstancias del adoptante.
Causa: Situaciones inesperadas como mudanzas, cambios de trabajo, problemas financieros o la llegada de un bebé pueden dificultar el cuidado de un perro.
Prevención: Antes de tomar la decisión de adoptar, hay que considerar la estabilidad actual y futura. Planificar un presupuesto para emergencias y cambios inesperados en la vida. Considerar tener una red de apoyo, como amigos o familiares que puedan ayudar con el cuidado del perro en los momentos difíciles.
Falta de tiempo y atención.
Causa: Cuidar de un perro requiere de tiempo y dedicación. Hay que responder con responsabilidad al compromiso adquirido. Algunos adoptantes subestiman la cantidad de atención y actividad física y mental que requiere un perro.
Prevención: Previo a adoptar, se debe de evaluar honestamente el estilo de vida y capacidad para dedicarle tiempo a un perro. Algunos razas de perros o mestizos descendientes de esas razas, requieren mas ejercicio y estímulos que otros. Por esta razón, es importante elegir un perro que se ajuste al nivel de actividad y tiempo disponible. Es esencial establecer una rutina diaria que incluya tiempo para pasear, jugar y entrenar.
Conflictos con otros animales.
Causa: La introducción de un nuevo perro en un hogar donde ya viven otros animales puede resultar en conflictos, agresividad o estrés tanto para el recién llegado como para los anteriores residentes.
Prevención: La introducción debe de ser gradual y supervisada. Puede ser útil solicitar la guía de un etólogo (especialista en el comportamiento animal) para facilitar el proceso. También es conveniente preguntar en el refugio sobre las experiencias anteriores del perro a adoptar con los otros huéspedes del refugio.
Falta de compatibilidad.
Causa: En ocasiones, desafortunadamente, el perro adoptado simplemente no “encaja” con la familia, con otros animales o no se adapta al nuevo hogar.
Prevención: Disponga de tiempo con el perro antes de la adopción para evaluar la compatibilidad. Muchas organizaciones permiten realizar visitas de prueba o períodos temporales en la nueva casa antes de tomar la decisión final. Se debe ser honesto con el personal del refugio sobre las necesidades y expectativas para hacer una mejor elección.
Concluyo.
Adoptar un perro es una decisión que requiere un gran compromiso y preparación previa. Al conocer y comprender las causas comunes de devolución y cómo prevenirlas, los futuros adoptantes pueden y deben tomar las medidas necesarias para asegurarle al perro adoptado un hogar hasta el final de sus días. La clave está en la investigación, la preparación y el apoyo continuo para garantizar la relación exitosa entre el perro adoptado y su nueva familia.