Colapso traqueal en perros: Síntomas, diagnóstico, tratamiento y pronóstico.

El colapso traqueal es una afección crónica que afecta principalmente a perros de raza o talla pequeña, como el Chihuahua, el Yorkshire Terrier y el Pomerania. Más frecuente en su edad media o geriátricos. Esta condición ocurre cuando la tráquea, parte del tubo respiratorio, se debilita y se colapsa, dificultando el flujo normal del aire hacia los pulmones. El perro puede mostrar signos de asfixia y/o tos fuerte. En este artículo, exploraremos los síntomas, el diagnóstico, los posibles tratamientos y el pronóstico del colapso traqueal en perros. Te proporcionaré la información que necesitas para cuidar mejor a tu perro si presenta esta enfermedad.

¿Qué es el colapso traqueal?

La tráquea es un tubo flexible compuesto por anillos de cartílago que permite que el aire fluya desde la boca y nariz hacia los pulmones. En perros con colapso traqueal, los anillos de cartílago se debilitan, lo que provoca que la tráquea se colapse. Causando dificultad para respirar, tos y otros síntomas respiratorios. El estrechamiento puede afectar la zona cervical de la tráquea (en la parte del cuello), o la zona intratorácica (parte de la tráquea dentro del tórax) o a ambas.

El colapso traqueal es una enfermedad degenerativa, lo que significa que empeora con el tiempo. Si no se trata adecuadamente, puede afectar considerablemente la calidad de vida de tu perro. 

Síntomas del colapso traqueal en perros.

Uno de los síntomas más comunes del colapso traqueal es una tos seca y crónica, a menudo descrita como una “tos de ganso” debido a su sonido característico que parece un graznido. Otros síntomas son:

• Dificultad para respirar. Tu perro puede mostrar signos de respiración rápida o dificultosa, especialmente después de la actividad física.
• Sibilancias. Puede escucharse un sonido parecido a un silbido durante la respiración.
• Intolerancia al ejercicio. Los perros con colapso traqueal a menudo muestran menos interés en jugar o hacer ejercicio, ya que les resulta incómodo.
• Arcadas. Algunos perros pueden hacer arcadas, particularmente después de comer o beber.
• Cianosis. En casos graves, la falta de oxígeno puede provocar que las encías y la lengua de tu perro se tornen azuladas.

Es importante llevar a tu perro con el médico veterinario si notas alguno de estos síntomas. La detección temprana de este padecimiento ayuda a mejorar el pronóstico.

Diagnóstico del colapso traqueal.

Para diagnosticar el colapso traqueal, el médico veterinario iniciará haciendo un examen físico y evaluará los síntomas clínicos. La tos característica y los sonidos respiratorios anormales son señales clave que pueden indicar esta afección.

Las pruebas más comunes para confirmar el diagnóstico incluyen:

• Estudio radiográfico. Permite visualizar la tráquea y detectar el lugar del colapso.
• Fluoroscopia.  Es un “tipo de radiografía” en tiempo real que muestra cómo se comporta la tráquea durante la respiración.
• Endoscopía. Se introduce una pequeña cámara en la tráquea para observar directamente el colapso y evaluar la gravedad.
• Ecocardiografía. Se emplea para descartar problemas cardiacos, ya que con frecuencia el colapso traqueal se asocia con afecciones del corazón.

Tratamiento del colapso traqueal.

El tratamiento para el colapso traqueal varía según la gravedad de la condición. En casos leves, los cambios en el estilo de vida y la medicación pueden ser suficientes para controlar los síntomas. En casos graves, puede requerirse de cirugía.

Tratamiento médico.

1. Medicación. Los medicamentos que se utilizan para el tratamiento incluyen: Broncodilatadores, que facilitan la respiración, y corticosteroides, que reducen la inflamación. Los antitusígenos también se prescriben para controlar la tos.
2. Control de peso. El sobrepeso y la obesidad ejercen presión adicional sobre la tráquea. Mantener a tu perro en un peso saludable puede aliviar algunos síntomas.
3. Uso de arnés. Es crucial remplazar el collar tradicional con un arnés que no ejerza presión sobre el cuello y la tráquea.
4. Ambiente controlado. Evitar la exposición al humo (ambiental o como fumador pasivo), el polvo y cualquier irritante respiratorio (incluidos los productos de limpieza) puede mejorar los síntomas.

Tratamiento quirúrgico.

En casos graves de colapso traqueal, cuando el tratamiento médico no es suficiente, se puede considerar la cirugía. Existen varias opciones quirúrgicas, siendo las más comunes:

• Colocación de stents traqueales. Un stent es un tubo pequeño y flexible que se coloca dentro de la tráquea para mantenerla abierta.
• Prótesis traqueales externas. Se colocan fuera de la tráquea para proporcionar soporte adicional y evitar que se colapse.

Aunque la cirugía puede ser efectiva, no esta exenta de riesgos y complicaciones. Por ello, la decisión de operar debe de tomarse con el asesoramiento de un médico veterinario especializado en dicha cirugía. 

Pronóstico del colapso traqueal en perros.

El Pronóstico del colapso traqueal varía según la gravedad de la condición y la respuesta al tratamiento. En casos leves, los perros pueden tener una vida relativamente normal con la terapia adecuada y los cuidados pertinentes. Sin embargo, en casos más graves, la condición puede empeorar con el tiempo, lo que afectará de forma significativa la calidad de vida de tu perro.

Es fundamental seguir las recomendaciones del médico veterinario y realizar chequeos regulares para monitorear la progresión de la enfermedad. Los perros que responden bien al tratamiento pueden experimentar una mejora significativa en su calidad de vida.

Resumen.

El colapso traqueal es una enfermedad grave pero manejable si se detecta y trata a tiempo. Si tu perro es de raza o talla pequeña y presenta síntomas como tos persistente o dificultad para respirar, es esencial que busques atención veterinaria. Con el diagnóstico adecuado y el tratamiento continuo, puedes ayudar a tu perro a respirar mejor y tener una vida más cómoda.

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